La carta africana: Belavia incorpora tres Airbus A330-200 a través de una triangulación con Gambia para eludir sanciones
Belavia suma a su flota tres Airbus A330 que obtuvo de una aerolínea que jamás voló radicada en Gambia. La movida, diseñada para evadir sanciones occidentales tras el incidente de Ryanair y su apoyo a Rusia, se completó después de casi un año sin noticias sobre el destino de los aviones.
La aerolínea estatal de Bielorrusia, Belavia, se encuentra en el centro de una compleja operación de adquisición de aeronaves que no solo busca sortear las sanciones occidentales, sino que también sugiere un posible papel de Bielorrusia como intermediario para la llegada de aviones a la Federación Rusa.
La reciente aparición de tres Airbus A330-200 con el livery de Belavia es la culminación de una maniobra que involucró una aerolínea de fachada en Gambia y el traslado coordinado de cuatro aeronaves, incluyendo un Airbus A320, a Minsk el año pasado.
La comunidad aeronáutica internacional sigue de cerca las acciones de Belavia desde el desvío de un vuelo de Ryanair en mayo de 2021, que resultó en severas restricciones. Estas sanciones, ampliadas tras el apoyo bielorruso a la invasión rusa de Ucrania, impidieron a la aerolínea acceder a aeronaves y repuestos occidentales, forzando la devolución de su flota Embraer.
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La información obtenida durante el último año revela que la estrategia para reforzar la flota implicó a Magic Air, una misteriosa entidad registrada en Gambia. A pesar de figurar como propietaria de cuatro aeronaves Airbus –un A320 (MSN 2600, de aproximadamente 19 años) y tres A330-200 (MSN 491, 509 y 525, todos con alrededor de 21 años de antigüedad)– , Magic Air nunca inició operaciones comerciales. Su sitio web, lanzado en agosto de 2023, permanece con un escueto mensaje de "Próximamente". Un detalle relevante es que todas estas aeronaves fueron operadas previamente por Sky Aviation del Líbano.
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Los historiales de estas aeronaves son extensos. Los tres A330-200 (MSN 491, 509 y 525) volaron inicialmente para Emirates (entre 2002 y 2014), pasaron por la turca Onur Air y sirvieron brevemente en Saudi Arabian Airlines, antes de retornar a Onur Air en 2020 y ser almacenados. El A320 (MSN 2600) comenzó su carrera con la australiana Jetstar Airways en 2005 y luego formó parte de la flota de Bangkok Airways desde 2014, siendo almacenado en 2020. Los aviones cambiaron de propietarios registrados múltiples veces, incluyendo entidades como HKAC, Avolon, Bellinger Aviation Services y Lebanon Sky Aviation.
Contrario a lo que se esperaría, ninguna de estas aeronaves de Magic Air aterrizó en Banjul, capital de Gambia. En su lugar, permanecieron estacionadas en aeropuertos como Estambul-Atatürk (Turquía), El Cairo (Egipto) y Mascate (Omán). En un movimiento coordinado durante agosto del año pasado, los cuatro aviones partieron de estos diversos puntos y volaron a Minsk en cuestión de horas.
El Airbus A330 con matrícula C5-TAC partió de El Cairo el viernes 16 de agosto de 2024; el A320 registrado como C5-TAA despegó de Estambul el sábado 17 de agosto, seguido el mismo día por los dos A330 restantes, C5-TAB y C5-TAD, desde Mascate. El canal de aviación ruso Aviatorshina reportó estos aterrizajes en Minsk.
De acuerdo a lo reportado por nuestro medio asociado Aeroin, recientemente tres de estos Airbus A330-200 fueron observados en Minsk ya con los colores de Belavia y portando matrículas bielorrusas: EW-587PD (MSN 482), EW-588PD (MSN 489) y EW-589PD (MSN 503).
Estas aeronaves están actualmente en un proceso de mantenimiento exhaustivo, con la previsión de que inicien servicios comerciales durante la temporada de verano boreal. La discrepancia en los números de serie (MSN) reportados para los A330 en la fase de Magic Air y los ahora pintados para Belavia podría deberse a diferentes fuentes de información o identificadores en distintas etapas del traspaso.
La incorporación de estos A330, los primeros de fuselaje ancho para Belavia, plantea interrogantes sobre su sostenibilidad operativa. La dependencia de componentes y servicios occidentales para el mantenimiento de estos Airbus impondrá a Belavia retos logísticos severos, probablemente forzándola a buscar piezas en mercados no oficiales. Mientras tanto, la industria observa si Bielorrusia se consolida como un punto de tránsito para aeronaves destinadas a eludir el régimen de sanciones que pesa sobre la aviación rusa.
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